Antonino Aberastain
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Antonino Aberastain (San Juan (Argentina), 1810 ? Rinconada del Pocito, 1861), abogado y político argentino, líder liberal de la provincia de San Juan, gobernador en el año 1861, muerto después de la batalla de Rinconada del Pocito.
Estudió en su ciudad natal y en Buenos Aires, y se dice que dominaba siete idiomas. Se recibió de abogado en 1832, y fue juez en la época de Juan Manuel de Rosas. Más tarde fue ministro del gobernador de Salta, Manuel Puch. Vivió catorce años en Chile, dedicado a asesorar al gobierno de Copiapó y a la minería.
Después de la batalla de Caseros, el gobernador Nazario Benavídez lo hizo elegir diputado al Congreso Constituyente de 1853, pero lo reemplazó cuando quiso apoyar una revolución en su contra. Fue nombrado Ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Confederación y diputado nacional, pero renunció a ambos cargos.
Participó en la política de su provincia, como dirigente del partido unitario, y tuvo un papel secundario en el asesinato de Benavídez. Fracasó en llegar al gobierno, desplazado por el interventor federal José Antonio Virasoro. Dirigió la oposición en su contra y la revolución que terminó con el asesinato del gobernador y de su familia, en noviembre de 1860. Reunió una asamblea popular (de la que estaban excluidos los federales), que nombró gobernador a Coll. Éste nombró a Aberastain gobernador.
El presidente Justo José de Urquiza intervino la provincia, nombrando para el cargo al coronel Juan Saá, gobernador de la provincia de San Luis. Éste ordenó detener a los revolucionarios y reponer la legislatura disuelta, pero Aberastain se negó y se preparó para resistir. El 2 de enero de 1861, una nueva legislatura eligió gobernador a Aberastain, que declaró que la intervención federal era una agresión externa.
Saá invadió la provincia y atacó las débiles fuerzas sanjuaninas en la batalla de Rinconada del Pocito, el 11 de enero, derrotándolas por completo. El mismo gobernador estaba al mando de sus fuerzas y fue capturado; varios prisioneros fueron ejecutados, entre ellos Aberastain, fusilado por la espalda.
Su muerte fue tomada como excusa por el gobierno porteño para iniciar una nueva guerra civil, que tendría su punto culminante en la batalla de Pavón. Después de ésta, los porteños invadieron gran parte del interior, y en San Juan reunieron la legislatura que había elegido a Aberastain; ésta eligió gobernador a su amigo Domingo Faustino Sarmiento.