Carlos V de España

Recomendar esta página Ver en PDF Imprimir esta página
Wiki de astronomía.
Todo el poder de la Wikipedia y toda la esencia de la astronomía

Carlos María Isidro de Borbón

De Wikipedia, la enciclopedia libre

(Redirigido desde Carlos V de España)

Carlos María Isidro, pretendiente al trono de España

Carlos María Isidro, pretendiente al trono de España

Carlos María Isidro Benito de Borbón y Borbón-Parma, (Madrid; 29 de marzo de 1788Trieste, 10 de marzo de 1855), Conde de Molina, Infante de España, pretendiente carlista al trono español con el nombre de Carlos V. Fue el segundo hijo de Carlos IV y María Luisa de Parma y hermano de Fernando VII. Conocido por el sobrenombre de Don Carlos.

Carlos nació en el Palacio Real de Madrid. Entre 1808 y 1814 vivió prisionero de Napoleón en Valençay con sus hermanos. En 1814 volvió con el resto de la familia real a Madrid y juró la Constitución española de 1812. En septiembre de 1816 casó con su sobrina la infanta de Portugal María Francisca de Portugal (o de Braganza), hija del rey Juan VI de Portugal y de Carlota Joaquina de Borbón, su hermana. La pareja tuvo tres hijos:

En segundas nupcias casó con Maria Teresa de Braganza, Princesa de Beira, hermana de su primera esposa y con quien no tuvo descendencia.

Carlos era una persona muy religiosa, que creía en el derecho divino de la monarquía y en la sucesión legítima, por lo que a pesar de los intentos de sus partidarios de tomar las armas contra su hermano, siempre le fue fiel.

Tabla de contenidos

[editar] Pragmática Sanción

En mayo de 1830 Fernando VII publicó la Pragmática Sanción, que derogaba la Ley Sálica y que permitía a las mujeres acceder al trono español en ausencia de herederos varones. El decreto había sido originalmente aprobado en 1789 pero nunca se promulgó oficialmente. Hasta entonces Carlos había sido el heredero de su hermano.

El 10 de octubre de 1830 María Cristina de Borbón, cuarta esposa de Fernando VII, le dio una hija, que llevó el nombre de Isabel y desplazó a su tío de la línea de sucesión. Los apóstolicos continuaron apoyando los derechos de Carlos al trono, al considerar la Pragmática Sanción ilegal e intrigaron a favor de Carlos. Aunque en 1830 Carlos admitió la Pragmática Sanción, se retractó en 1833, recibiendo en marzo orden de abandonar España y fijar su residencia en los Estados Pontificios. El puerto de embarque había sido fijado en Cádiz pero debido a la epidemia de cólera que asolaba esta ciudad, se le permitió hacerlo en Lisboa. Ya en Portugal, apoyado en sus vínculos familiares con la dinastía reinante, retrasó una y otra vez su salida, se negó a volver a Madrid a jurar fidelidad a Isabel como sucesora ni aceptó hacerlo ante el embajador Luis Fernández de Córdova (abril de 1833). Fernando VII acabó por confiscarle sus bienes y enviándole una fragata con la orden de que el capitán entregase 400.000 reales a Carlos una vez que el navío hubiese zarpado. Pero no sólo volvió a negarse a embarcar sino que comunicó a los principales gobiernos europeos su decisión de no renunciar al trono de España. Estuvo siempre muy apoyado en estos hechos por Joaquín Abarca, obispo de León, desterrado en Portugal.

[editar] Carlos V

Al morir Fernando VII el 29 de septiembre de 1833, Carlos emitió el manifiesto de Abrantes el 1 de octubre en el que declaraba su ascensión al trono con el nombre de Carlos V. El 6 de octubre el general Santos Ladrón de Cegama proclamó a Carlos como rey de España en la localidad de Tricio (La Rioja), fecha en la que se da como comenzada la Primera Guerra Carlista.

Tras la derrota de los miguelistas en la guerra civil portuguesa y acosado por la tropa de Isabel II que al mando del comandante general de Extremadura José Ramón Rodil y Campillo había penetrado en Portugal, Carlos fue evacuado por mar en un buque de guerra británico, ante las protestas españolas, llegando a Gran Bretaña el 18 de junio de 1834. En julio huyó de la isla, atravesó Francia de incógnito ?aún no se han aclararado las presuntas complicidades de los gobiernos británicos y franceses en la fuga?, entrando en España por la frontera de Navarra el 9 de julio. Permaneció en Navarra y en las Provincias Vascongadas durante la Primera Guerra Carlista hasta el año 1839, manteniendo corte ambulante en Oñate, Estella, Tolosa, Azpeitia y Durango, acompañando a su ejército, pero sin mostrar dotes militares.. En octubre de 1834 un decreto lo privó de sus derechos como Infante de España, hecho que fue confirmado por las Cortes en 1847.

Hombre religioso y de costumbres sencillas, fue muy bien recibido por la población rural de estas tierras. Adolfo Loning dice que era de carácter antipático, sin palabra ni mirada amable para los soldados. Lassala afirma que jamás fue visto en el campo de batalla. En 1835, mientras en el campo se iniciaba la desordenada retirada carlista tras la batalla de Mendigorría, se hallaba comiendo en el pueblo y estuvo a punto de caer preso.

Casa de don Carlos en Durango en el año 1837. Dibujo de Isodoro Magués

Casa de don Carlos en Durango en el año 1837. Dibujo de Isodoro Magués

En verano de 1837 organizó la llamada Expedición Real en la que al frente de gran parte de sus batallones vascos, castellanos y navarros marchó por Cataluña y el Maestrazgo hasta las puertas de Madrid, al parecer siguiendo noticias falsas sobre un posible matrimonio entre uno de sus hijos con Isabel II. No se cumplieron sus espectativas y ya en retirada, acosado por Baldomero Espartero, volvió con sus tropas a Vizcaya. Ante la frustración producida por su fallido intento para solucionar el problema sucesorio así como por la desastrosa retirada, tomó drásticas medidas sobre los mandos de su ejército y de su administración: oficiales y civiles que le habían servido desde la época de Zumalacárregui fueron desposeídos del mando, encarcelados, enjuiciados, incluso asesinados. Su corte acabó componiéndose de consejeros poco competentes y sin iniciativa, siendo el obispo Abarca el más influyente. Se les llamaba “ojalateros” ya que se contaba que no hacían otra cosa que quejarse de lo ocurrido durante la Expedición Real, con frases que empezan siempre con “Ojalá … “.

La actitud pesimista de la corte frente a los problemas civiles y mitares provocaron gran descontento tanto entre los mandos como en la tropa, acrecentándose también las desconfianzas entre sí de los batallones de las tres provincias vascas y navarras -que rehusaron combatir fuera del ámbito geográfico de sus provincias- así como con los batallones castellanos. En octubre de 1837, tras la muerte de su primera mujer, casó con su sobrina María Teresa y en junio de 1838 nombró a Rafael Maroto como comandante en jefe, el cual se dedicó la reorganizar el ejército, pero afrontando escasas acciones bélicas. En febrero de 1839 mandó fusilar a tres generales ante la sospecha que habían estado organizando un complot contra él y exigió a Carlos la destitución de todos sus adversarios. Ante esto, Carlos lo destituyó el 21 de febrero y lo declaró traidor, aunque el 25 de febrero reconsideró su postura y accedió a sus peticiones. Maroto comenzó negociaciones secretas con los isabelinos que concluyeron en 1839 con la firma del Convenio de Oñate, también conocido como abrazo de Vergara. Su archivo confiscado por Espartero y depositado en 1839 en la biblioteca del obispado de Calahorra, está desaparecido.

Don Carlos dibujado por Isidoro Magués en 1837

Don Carlos dibujado por Isidoro Magués en 1837

El 14 de septiembre de 1839 cruzó la frontera francesa y el gobierno frances decidió instalarlo en Bourges con su mujer e hijos. Allí el 18 de mayo de 1845 abdicó en su hijo Carlos Luis, que adoptó el título de Carlos VI.

[editar] Conde de Molina

Tras su abdicación usó el título de conde de Molina y el 10 de marzo de 1855 murió en Trieste, entonces parte del Imperio Austrohúngaro.

[editar] Bibliografía

  • John Francis Bacon. Seis años en España. Bilbao 1838
  • Alfonso Barres de Molard. Memoires sur la guerre de la Navarre et des Provinces basques. París 1842
  • Luis Bordas. Hechos históricos y memorables acaecidos en España desde la última enfermedad de Fernando VII hasta la conclusión de la guerra de los siete años. Barcelona 1846
  • Fernando Fernández de Córdova. Mis memorias íntimas. 4 tomos. Madrid 1886-1889
  • Luis Fernández de Córdova. Memoria justificativa … París 1837
  • Galería Militar Contemporánea. 2 tomos. Madrid 1846
  • Félix Lichnowsky. Recuerdos de la guerra carlista (1837-1839). Madrid 1942
  • Adolfo Loning. Das spanische Volk in seinen Ständen, Sitten und Gebräuchen mit Episoden aus dem Karlistischen Erbfolgekriege. Hannover 1844
  • Isidoro Magués. Don Carlos e i suoi Difensori. Firenze 1837
  • Panorama Español. Crónica Contemporánea. 4 tomos. Madrid 1842-1845
  • Antonio Pirala. Historia de la guerra carlista y de los partidos liberal y carlista. Segunda edición. 6 tomos. Madrid 1867-1871
  • Guillermo von Rahden. Andanzas de un veterano de la Guerra de España. Pamplona 1965
  • Augusto von Goeben. Cuatro años en España. Pamplona 1966
  • Jaime del Burgo. Para la Historia de la Primera Guerra Carlista. Pamplona 1981


Predecesor:
Fernando de Borbón y Borbón-Parma
Príncipe de Asturias
18081830
Sucesor:
Isabel de Borbón y Borbón-Dos Sicilias
Predecesor:
Primer pretendiente
Pretendiente carlista al trono de España
18331845
Sucesor:
Carlos Luis de Borbón y Braganza
(como Carlos VI de España)

Wikisource
En Wikisource hay una copia de
Manifiesto de Abrantes.

Scroll to Top